Pinturas para superficies metálicas

Pinturas para superficies metálicas

El efecto del agua sobre el metal expuesto a la intemperie se puede evitar, si previamente se recubre con pintura especial para este fin. Por: Arq. Diego Levinson  Los metales, cuando están expuestos a las inclemencias del tiempo, especialmente en zonas de mucha humedad, sufren la alteración de sus propiedades. El clima los degrada, si están sin cobertura, lo que provoca cambios no solo en su apariencia, sino también en su capacidad de resistencia. Por ello, es necesario preparar la superficie, para aplicar los productos especiales que la protegen y que a la vez le brinden un acabado acorde a los requerimientos estéticos del proyecto. Podemos percibir el deterioro de una superficie metálica cuya pintura o revestimiento protector no ha sido el adecuado, o ya cumplió si vida útil, cuando el óxido comienza a levantar y descascarar el producto y dañar el material. La presencia de iodo y humedad en el aire, así como también de sal en las zonas costeras, oxida la superficie y la debilita. Para evitar estos inconvenientes que se deben realizar tareas periódicas para mantener los acabados en óptimas condiciones y asegurarnos de la persistencia de las propiedades estéticas y físicas del material. Existen diversos productos, como esmaltes, pinturas o galvanizados, especialmente formulados para proteger los metales en edificios, ya sean estructuras, cerramientos o incluso muebles. En el mercado regional se ofrecen pinturas antioxidantes de todas las marcas y para diferentes tipos de elementos. Tal es el caso de los productos Protecto los cuales son diseñados para un alto desempeño en superficies interiores y exteriores, por lo que son utilizados con frecuencia sobre estructuras galvanizadas, torres de transmisión y marcos de ventanas, entre otras piezas metálicas; ya que resisten temperaturas extremas. Se recomienda no aplicarlos en superficies cuya temperatura sea inferior a los 10º C. Es necesario tener en cuenta varios aspectos en la preparación de la superficie antes de aplicar el producto elegido. Se debe estudiar si el material es antiguo o nuevo y si ya fue pintado. La limpieza previa es determinante para la perfecta adherencia de antioxidantes y pinturas, también llamadas imprimación. Si la pieza a tratar no está muy deteriorada, es posible remover los restos de óxido mediante una limpieza manual, con una lija o algún otro abrasivo. Si el estado de oxidación es muy avanzado, se debe realizar una limpieza profunda, para que no queden rastros de sustancias que dañen al material una vez pintado. Para ello se puede utilizar, en forma manual, un cepillo de acero o alambre, o mediante taladros o tornos para aplicación mecánica con más fuerza. También es habitual emplear chorros de arena a presión, con los que es posible llegar a lugares donde no se podría llegar con lijas o cepillos. Si el metal ya fue pintado o las capas de óxido están muy adheridas a la superficie, habrá que aplicar removedores químicos y desoxidantes, lo que se hace con un pincel, para luego removerlos con lijas y espátulas que quiten los restos. Una vez removidos el óxido y la pintura, es necesario lavar y limpiar cuidadosamente, dejar secar y recién en ese momento aplicar los productos antioxidantes y pinturas. Los expertos de Protecto explican que el anticorrosivo Fast Dry requiere un tiempo de secado en exteriores de 2 a 4 horas, mientras que con el esmalte anticorrosivo tipo rústico, el tiempo de secado mínimo es de 1 hora. Pintura o antioxidantes Una vez preparada la superficie es recomendable aplicar una o dos capas de pintura o antioxidantes. Entre mano y mano se debe dejar secar muy bien el producto. Por lo general, el acabado de estos productos es mate, para facilitar la adherencia de la pintura de terminación. Pinturas Popular de República Dominicana, los fabrica en ocho colores diferentes, para satisfacer los requerimientos decorativos de los usuarios y a la vez reducir el consumo de la pintura de terminación, utilizando para ello el anticorrosivo y un acabado del mismo color. Las diferentes marcas de pinturas de nuestra región fabrican excelentes productos que actúan sobre los metales e inhiben la formación de capas de óxido. Estos pueden ser a base de cromato de zinc o de minio de hierro. Los primeros crean una película protectora, incluso sobre láminas de hierro galvanizado, que endurece rápidamente y permite una excelente adherencia del acabado final. El minio de hierro, que viene en varios colores, también se adhiere al material para crear una piel protectora y adherente. Es el más común de los antioxidantes y se consigue en todas las pinturerías o ferreterías. Lanco recomienda el uso de pinturas que contienen sustancias como el óxido de hierro y el cromato de zinc. Otra forma es utilizar pinturas con zinc, de manera que lo que se correo es la pintura y no el acero, de manera que este queda protegido. También existen pinturas especiales para metales, que no requieren la imprimación previa porque su composición química incluye las propiedades protectoras que evitan la degradación del material. El esmalte alquídico Oxiguard, que es el inhibidor de la corrosión para metales ferrosos de Pinturas Popular, está diseñado para servir como una barrera contra el agua, evitando su contacto con el hierro y su acción perjudicial sobre este. La resina alquídica que lo compone es altamente flexible, por lo que resiste sin agrietarse los habituales cambios de temperatura que proporciona nuestro clima. En el caso de Lanco, esta empresa fabrica una gama de primers, pinturas anticorrosivas y esmaltes. Entre los primers podemos mencionar el tipo minio, rojo o gris, de secado normal o rápido, y el cromato de zinc. Entre las pinturas están las anticorrosivas para techo y el esmalte porcelanizado Rust Eliminator. Los convertidores de óxido son productos creados especialmente para tratar piezas metálicas muy deterioradas, en las que los antioxidantes comunes no serían eficientes. Al igual que con los demás ejemplos que hemos visto, es necesario liberar la superficie a tratar de toda partícula suelta mediante lija a mano o limpieza mecánica. Se consiguen de distintas marcas y en variedad de colores. La empresa de pinturas guatemalteca Duwest, asegura que como todas las pinturas son polímeros, estos se convierten en un aislante ya que deben recubrir por completo al metal.  Dependiendo de la cantidad de espesor del recubrimiento aplicado, mejores serán las características aislantes del mismo. Debido a que los productos de aceite o alquidalicos y poliuretanos tienen una restricción de espesor máximo a aplicarse, es necesario considerar la aplicación de un primario epóxido, que permita aplicarse a  mayores espesores para una mejor aislación del sustrato.  Acabados Una vez preparada la superficie con una imprimación adecuada, el acabado final del material se logra mediante diferentes tipos de pinturas, de acuerdo a los requerimientos estéticos del proyecto, que se adhieren perfectamente a la pieza. Estos esmaltes finales impiden el desarrollo de óxido y constituyen la barrera final contra la humedad y la salinidad del ambiente. Deben resistir los golpes, la incidencia del sol y es importante que no se descascaren, lo que permitiría un contacto entre el metal y el aire o la humedad. Duwest recomienda que todo primario anticorrosivo, sea recubierto con acabado tipo esmalte compatible con el primario.  Para ello se debe aplicar un acabado de alta calidad a fin al primario para de esta forma maximizar la durabilidad del producto Entre los diferentes tipos de pinturas, que responden a las diversas características o a la ubicación de los elementos a pintar, tenemos las bituminosas, que se recomiendan para las piezas que estarán enterradas y los aceites y lacas, para las que quedarán a la vista. Pinturas Sur Química destaca que la aplicación de un sistema de pintura anticorrosivo busca la combinación de dos mecanismos de protección: el primero es la protección electroquímica de la superficie pintada, de lo que se encarga el anticorrosivo primario, mediante los pigmentos especiales que contiene; el segundo mecanismo es la protección de tipo físico, que se logra al aplicar la capa de acabado, ya que funge como barrera protectora que impide el contacto del agua con el metal. Tomando en cuenta lo anterior y el hecho de que fabrica productos con resinas altamente impermeables, como las epóxicas y los poliuretanos, asegura que sus sistemas garantizan un excelente aislamiento de la superficie, cuando se emplean adecuadamente. Uno de los productos más utilizados para pintar puertas y ventanas y demás elementos metálicos que estarán en contacto con el exterior es el esmalte sintético, debido a su resistencia al desgaste y a las inclemencias del tiempo. Su fórmula combina resinas sintéticas y aceites; se disuelve con solventes y puede tener un acabado brillante, que es el más resistente; satinado o mate, que por ser más rústico, se mancha con mayor facilidad. Por sus diferentes presentaciones y variados colores, son los preferidos por muchos clientes y profesionales. Su consistencia permite que puedan ser aplicados con pincel, brocha, rodillo o pistola. Existen también las pinturas a base de breas y alquitranes, llamadas bituminosas. Son consistentes y en ocasiones se las aplica con espátula. Se disuelven con solventes. En el caso del Volcan-DuPont de Sherwin Williams, se ofrece atención personalizada a clientes particulares, contratistas, diseñadores, arquitectos y empresas con el fin de asesorar al cliente en el uso correcto de los productos para obtener el beneficio máximo de los mismos. El asesoramiento se ofrece directamente en las instalaciones del cliente para brindar un servicio completo y garantizar la satisfacción del cliente. En los proyectos industriales que requieran una alta resistencia a los químicos, es recomendable el uso de pinturas epóxicas, compuestas por una resina y un endurecedor que se mezclan y endurecen rápidamente. El producto forma una película con muy baja porosidad y características higiénicas que lo hacen ideal par Otro proceso habitual en el tratamiento de los metales es el del galvanizado, presente en la mayoría de las chapas onduladas utilizadas en techos y cubiertas. Consiste en la aplicación de una película de zinc sobre la lámina metálica, que debe estar perfectamente limpia. Se realiza sumergiendo la pieza en bateas de zinc fundido con cloruro de amonio, para luego enfriarla. Si bien es un método muy efectivo, con el tiempo se deteriora y corroe. En algunos casos, como en artefactos de baño, piezas especiales y en la fabricación de grandes recubrimientos metálicos de colores, se utiliza una técnica de pintura llamada esmaltado, mediante la cual se recubren los metales con productos líquidos a base de cuarzo y arcilla, que se funden en un horno a altas temperaturas. El acabado final se logra a través de la inmersión en otro baño de cuarzo, arenas, feldespatos, arcillas, boro y óxidos para pigmentación, que ingresa nuevamente al horno. Este proceso es totalmente industrial y los metales a tratar deben ser fabricados para este fin bajo estrictas normas de producción y calidad, que le permitan soportar las altas temperaturas del horno y el posterior enfriado rápido. El producto final es altamente resistente, con excelentes propiedades higiénicas, de fácil limpieza y no inflamable. No absorbe olores y se limpia fácilmente, por lo que lo podemos encontrar en cocinas, laboratorios y quirófanos, así como en grandes fachadas, techos y cielorrasos. Sherwin Williams comercializa productos elaborados con resinas asfálticas, que aíslan una superficie de hierro colocada bajo tierra o sumergida, para evitar su rápida oxidación. Las empresas productoras de pinturas de Centroamérica y el Caribe han desarrollado productos altamente eficientes que responden a las características del clima de la región. Tal es el caso de Sur Química S.A., que cuenta con un Departamento de Servicio Técnico en cada uno de los países en los que comercializa sus productos, integrado por profesionales altamente capacitados y con amplia experiencia, que brindan un asesoramiento técnico e inspeccionan las obras, con el fin de dar seguimiento a los trabajos de pintura e identificar y solucionar los problemas que se puedan presentar, además de capacitar a sus clientes. La humedad, el sol, la salinidad de la brisa marina y las demás características del clima tropical actúan agresivamente sobre los elementos metálicos. El óxido se presenta muy rápido si no se ha tratado la pieza convenientemente, incluso desde su fabricación. Las diferentes pinturas y esmaltes se adaptan a cualquier proyecto y brindan la protección necesaria para alargar la vida útil de los materiales.